PRINCIPAL  |   CONTACTO

 
   

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 
Críticas

 

 

Sabela Baña, la geometría del sentimiento
 

 

 

Sabela Baña se instala en la geometría del sentimiento, en el instante, en la percepción del momento de la conciencia de la artista. Sus formas son dinámicas, potencian un cierto pulso nervioso, que se entretiene consigo mismo, que se habilita con contumacia y determinación.


Su manera de ver las cosas es sutil, suave, elegante, pero, a la vez, pulsando el romance, o bien el fuego, a veces es hielo, también flor de la pradera, asimismo agua cristalina, amanecer, luna llena, sol ardiente, siempre fijándose en la música del ambiente.


Aparece la poesía, elipsis, metáfora, elegancia del sentimiento que brota de la forma, que la hace estremecer, alejándola del hieratismo.


Su obra estructura no es hierática porque busca el nervio del momento. Es parte de su propia poesía, es consustancial con su actividad y actitud frente a lo que se conoce y a lo que está por conocer.


Surge de momentos, de determinados instantes, formulando un discurso claro, demoledor y preciso, en el sentido de ser coherente con sus propios cambios, con su nerviosismo y con su capacidad de transmutar, buscando aquellos segundos mágicos, esos instantes de serena percepción.


Su ritmo es alto, está en plena carrera, trasgrede el silencio, supera la calma, se instala en la cresta de la ola para pintar las geometrías que la conducen hacia el camino de cristal de la ancha llanura.


Establece su camino en la variación, se posiciona en determinados laberintos para superarlos, pero, también, pretende ir más allá de la anécdota para acabar siendo constante y coherente con sus consecuentes cambios e interactuaciones.


Enfila su obra como producto del momento, del instante preciso, de la alegoría final de un entendimiento subconsciente con el color.


El color determina una serie, pero, también surge de lo que es onírico, para nutrirse y nutrir, adjetivar aquello que observamos y hacerle recitar poemas al viento en momentos de percepción con los instantes en los que la naturaleza se eleva majestuosa, casi como por arte de magia, en el terraplén de la vida, como consecuencia de la actividad demoledora de las neuronas y células, que forman ejércitos de iluminación energética, al igual que sus estructuras y formas, que son consecuencia del pulso del mundo.

 

 

 

Joan Lluís Montané
De la Asociación Internacional de Críticos de Arte (AICA)

 

 

 

  

 

Principal | Biografía | Críticas  | Artículos | Francisca Blázquez | Reportajes | Enlaces | Contacto

 © 2006-2020  www.joanlluismontane.net

Aviso Legal

         

Diseño ServiwebSI